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Tuesday, March 21, 2023

Iconografía floral en los tejidos. Estudio de las flores por tres grandes pensadores

 Iconografía floral en los tejidos. Estudio de las flores por tres grandes pensadores


Por Alicia García Falgueras

Doctora en Psicobiología

Investigadora Universitaria de la Biblioteca Nacional Española (carnet número I-272677)





RESUMEN

La moda es un arte vivo, en constante movimiento y simbiosis con las

estaciones y los cambios de tiempo y épocas. En este escrito analizamos

brevemente las flores como fuente de inspiración de la moda en su iconografía

floral sobre los tejidos. Asimismo expondremos el pensar y el trabajo

descriptivo sobre las flores de tres genios: Leonardo da Vinci, Charles Darwin y

Carolus Linnaeus, quienes estudiaron botánica y avanzaron importantes

conocimientos en la descripción y entendimiento de las flores, influyendo en la

moda. De forma necesariamente escueta expondremos algunos ejemplos

florales de telas magníficamente preservadas y pertenecientes a diferentes

momentos históricos. De forma descriptiva, comentaremos algunos ejemplos

de actuales tejidos florales entre diferentes culturas.


PALABRAS CLAVE

Flor, flores, colorido, moda, tejidos, Renacimiento, Leonardo da Vinci, Charles

Darwin, Carolus Linnaeus, botánica, clasificación, denominación, España,

Andalucía, Holanda, Europa.


ABSTRACT

Fashion is a living art, in constant movement and symbiosis with the seasons

and changes of time and times. In this paper we briefly analyze flowers as a

source of inspiration for fashion in their florgraphy iconography on fabrics. We

will also expose the thinking and descriptive work about the flowers of three

geniuses: Leonardo da Vinci, Charles Darwin and Carolus Linnaeus, who

studied botany and advanced important knowledge in the description and

understanding of flowers, influencing fashion. In a necessarily concise way we

will present some floral examples of superbly preserved fabrics and belonging

to different historical moments. In a descriptive way, we will comment on some

examples of current floral fabrics between different cultures.


KEYWORDS

Flower, flowers, colorful, fashion, fabrics, Renaissance, Leonardo da Vinci,

Charles Darwin, Carolus Linnaeus, botany, classification, denomination, Spain,

Andalusia, Holland, Europe.


1.- INTRODUCIÓN

Las flores han sido un tema de amplio de estudio minucioso para

algunos de los pensadores más importantes y relevantes de nuestra historia

como Leonardo da Vinci, Charles Darwin o Carolus Linnaeus (Rix, 2012). En el

antiguo Egipto las flores de loto, los nenúfares, o mandrágoras y las flores

típicas del entorno vegetal del Nilo se representaban con frecuencia en las

vasijas, decoraciones en paredes y en los tejidos (Saladrigas Cheng, 2001). De

las expediciones de Napoleón, quedaron testimonio de las expresiones en la

moda de las mujeres egipcias: las mujeres de la clase administrativa, solían

rasurarse la cabeza y para cubrirse llevaban turbantes o velos (Bravo, 1999;

Entwistle, 2002; Cosgrave, 2005). Los aromas y perfumes de las flores (aciano,

amapolas, crisantemos, malvas, lirios, espuela de caballero, jazmines, hiedra,

mandrágora, cañas de papiro y flores de loto) estaban muy presentes en los

hábitos diarios de las egipcias (baños y mascarillas tensadoras de Cleopatra) o

como ofrenda a sus dioses, elaborando tónicos, perfumes o ungüentos

(Cosgrave, 2005).


Las características que hacen de la flor un elemento tan bello y

recurrente no están bien definidas. Podría deberse a su forma o a su

naturaleza simétrica y matemáticamente distribuidas en 1, 2, 3, 5, 8, 14, 21, 34

ó 52 pétalos. La simetría fue un tema de estudio de Darwin. Por ejemplo, el

esquema básico floral de la familia Rosaceae, consiste en cinco pétalos (como

la rosa canina salvaje) unidos de una manera especial a su base. La flor de la

fresa (Fragaria Vesca) o la cariofilada (Geum urbanum) serían de este tipo.

Quizá la afinidad por las flores en la moda se debiera a sus imaginativos y

variados diseños de formas y colores atrayentes y sugerentes para conseguir la

colaboración de los insectos en sus polinizaciones, como dibujó Da Vinci. 

Pudiera ser por su curiosa distribución en cuanto a los géneros de macho y

hembra dentro o fuera de cada flor, como definió Linnaeus.


La palabra textil proviene del latín texere que significa tejer. En épocas

pasadas, sólo las telas tejidas recibían la consideración de textil, pero hoy día

se denomina así también las fibras sintéticas o las telas no tejidas (Alonso

Felipe, 2015). Desde el antiguo Egipto, el rango social se definía por la calidad

de las telas que lucían. De esta manera, la falda del faraón se hacía con lino

fino y posiblemente adornada con hilo de oro, mientras que los plebeyos

llevaban falda hecha con fibras vegetales (Cosgrave, 2005).

Los tejidos en la actualidad están continuamente innovándose y

mejorándose para diferentes propósitos. La seda procedente de China fue una

fibra muy valorada y trabajada, con diseños en tejidos de tipo geométrico,

epigráfico y vegetal de ataurique, que incluían las flores (Guillén Santoro,

2011). En la actualidad, las propiedades curativas de la seda han sido

investigada en medicina y odontología como material de apoyo para la

regeneración ósea o dental. Microscópicos fragmentos de seda implantados en

huesos del cráneo parietal dañados de conejos blancos, facilitaba la

regeneración ósea mediante las barreras creadas. Los inconvenientes de éste

método serían que este tejido de seda no puede ser absorbido por el

organismo y ha de extraerse con cirugía posterior y por otro lado, el hueso

originado no es equivalente en robustez al hueso original (Lee y cols., 2015).


2.- FORMAS Y FUNCIÓN DE LAS FLORES

Leonardo di Ser Piero da Vinci (1492-1519) estudió las plantas en un

pionero análisis de botánica que realizó en el año 1.480. De este trabajo de

búsqueda de la comprensión y el entendimiento de los vegetales en la región

italiana de Montalbano en la Toscana, resultaron muchos dibujos preciosos en

sus cuadernos. Son dibujos propios de un artista, pero que procuran ir más allá

y comprender el mecanismo subyacente, en los que se recrea la forma exacta

y precisa mediante el estudio observacional de las flores, la manera en que

crecen, sus formas, las diferencias entre unas y otras, su mecánica o

funcionamiento, etc. Pueden apreciarse en sus dibujos la tónica dominante en

la obra de Da Vinci, que sería su función o mecanismo y la exaltación de la

belleza sobre lo efímero. También se aprecian sus misteriosas anotaciones en

escritura invertida, describiendo los dibujos y lo representado en ellos (Fig. 1).



Fig. 1.- Diferentes dibujos de Leonardo da Vinci, respecto sus estudios sobre las flores, sus formas, crecimiento y diversidad. El dibujo de la derecha es un dibujo-estudio de una flor de lirio (Lilium candidum) realizada en los años 1480-1485. Como la mayoría de sus otros dibujos, está realizado con pluma y tinta sobre lápiz negro con realces blancos (324 x 177). El dibujo superior derecho representa la rosa de Jericó (star of Bethlehem, fechado aprox. en 1507) y realizado con pluma y tinta sobre tiza roja de fondo. En el lado izquierdo dos ejemplos de su estudio mediante descripciones de flores, tipo rosas, en su forma y mecánica.


3.- GÉNERO EN LAS FLORES

Carolus Linnaeus, también conocido como Carl von Linné (1707-

1778) fue un botánico sueco que pudo clasificar y denominar todo el reino

vegetal en su obra Systema Naturae (Paises Bajos, 1758). Creía firmemente

que el universo era una proyección de Dios y que aquellos que lo estudiasen

con los ojos abierto, podrían describir el orden natural (de la naturaleza y divino

como sinónimos). También estudió la simetría, asegurando que el hecho de

que existiese la “simetría infinita” en las más pequeñas cosas probaba que Dios

había creado la Naturaleza (Schmitz y Uddenberg, 2007).


La clasificación de las flores de Linnaeus mediantes sencillas

esquematizaciones sigue un símil humano o antropomorfo. En él se analiza “el

amor entre las flores” y se describe el “lugar de las nupcias”, la afinidad y

subordinación entre los machos según el número de estambres (de 1 a 20 ó

más) en relación al pistilo y según los machos estén o no subordinados entre

sí: 1) no subordinación: monandria, diandria, triandria, tetrandria, pentandria,

hexandria, heptandría, octandria, enneandria, decandria, dodecandria,

icosandria, poliandria. 2) sí subordinación: didynamia y tetradynamia), etc.

También se clasifican según el “número de camas” según la distribución de los

pétalos o su naturaleza de unión clandestina (González-Bueno, 2001) (Fig. 2).

Fig. 2.- Esquema clasificatorio y aclaratorio de Carolus Linnaeus sobre la naturaleza de las flores según su sistema de distribución y proporción entre los géneros, la relación entre éstos y la forma de  privacidad de los pétalos. En Systema Naturae (Países Bajos, 1758).


Relacionado con la moda y por lo tanto con los tejidos y las telas, los

conceptos de masculinidad y feminidad se redefinen cuando se trata de las

flores. Las aportaciones teóricas de Leonardo dan Vinci, Charles Darwin,

Carolus Linnaeus y otros botánicos previos respecto a la clasificación del

género de las flores, contribuyeron a esta “asexualización” de la flor como

ornamento neutro tanto para hombres como para mujeres. La gran mayoría de

las plantas son hermafroditas y tienen “flores perfectas” en tanto que conservan

el equilibro entre sus cuatro espirales, diferenciadas en específicos tejidos: los

sépalos, pétalos, estambres y carpelos centrales (Pannel, 2017). Esta idea de

neutralidad de género o hermafroditismo en las flores puede apreciarse en

estos grabados del Renacimiento, siglo XV, (Fig. 3), donde se distinguen

floritura y adornos en los tejidos que llevan tanto figuras masculinas como

femeninas:


Fig.3.- Cuatro figuras masculinas castellanas (tres en imagen de izquierda y una en derecha) con vestimentas del Renacimiento (S. XV, España. aprox. año 1450) y detalle de tejido con forma de flores, vegetales y florituras. Fuente Biblioteca Nacional de España, Biblioteca Digital Hispánica.


4.- SIMETRÍA EN LAS FLORES

La simetría en los tejidos y bordados con motivos florales está presente,

teniendo estas formas matemáticas y simétricas en su número de pétalos, a

veces asimilándose a estrellas. Esto es debido en parte a las características de

los telares, por la urdimbre matemáticamente distribuida en tensas líneas

paralelas y equidistantes de forma longitudinal, por donde pasa la lanzadera

para dejar la trama de cualquier tipo de fibra (Buckley, 2012), siendo el bordado

más libre en su composición. En la región de Al-Andalus, Sudeste asiático y

Marruecos, durante los siglos XI y XII (época Almorávide y Almohade en

Córdoba, Valencia o Sevilla, así como el norte de África), la decoración en los

telares procuraba igualarse en lo posible a los ornamentos equidistantes

empleados en la arquitectura o en las miniaturas de los libros iluminados, así

como a las miniaturas de los Coranes. (Partearroyo Lacaba, 2005).


También se ha estudiado en detalle y analizado los colorantes utilizados

en los tintes y los ligamentos con los que tejieron las piezas textiles. Por

ejemplo, los colorantes se analizan por químicos del Instituto del Patrimonio

Histórico aportando datos muy interesantes sobre su origen ancestral. En la

mayoría de las ocasiones, los tejidos se teñían con tal maestría que aún hoy se

han podido conservar parte de la viveza de los colores de los siglos XI y XII. Se

empleaban recetas y técnicas antiguas transmitidas en secreto de generación

en generación, siendo la mayoría de los tintoreros de origen judío (Llorente,

2014). Los colores fundamentales eran el rojo (de la raíz de la rubia Alfuwa o

granza), el amarillo (de la cúrcuma o los estigmas del azafrán), el negro y

marrón (cáscaras de nuez) y el azul (de la isaquis en el mes de agosto)

(Partearroyo Lacaba, 2005). El color rojo o granate, muy característico de la

época Nazarí, hasta casi simbolizarla, también se extraía de un parásito,

llamado coccus iilicis (cochinilla) y posteriormente mediante exploraciones

españolas del continente sudamericano y sus materias primas, se sustituyó por

la anilina (Olivares y Zapata, 1965).


En el museo Lázaro Galdiano existen piezas de tela floreadas de origen

italiano, concretamente veneciano, con terciopelo labrado en seda del siglo XVI

(Inv. 1637 y 11489), destacando la afinidad de los italianos por la belleza floral

en diferentes momentos históricos y quizá recogiendo el trabajo de Da Vinci por

la flora italiana (Zollner, 2003). En los Países Bajos esta afinidad decorativa por

las flores estuvo también muy presente en esos siglos y posteriores, como lo

demuestran estos pendientes con bonitas flores de adorno de autor anónimo

del S. XVII (Fig. 4).

Fig. 4.- Representación pictórica de estética flamenca del siglo XVII mediante unos pendientes de autor anónimo con decoración floral y motivos vegetales. Fuente la Biblioteca Nacional Española, biblioteca digital hispánica.


 Lázaro Galdiano, en parte debido a su elevada sensibilidad artística
(López-Redondo, 2010; Guillén Santoro, 2011) y en parte por su posibilidad
económica de recopilar arte, pudo adquirir y conservar tejidos muy valiosos,
principalmente islámicos y con variadas decoraciones simétricas (aves,
dragones, formas vegetales). Por ejemplo, en su colección existen ejemplos de
los siglos XIV al XVII, teniendo estos tejidos nazaríes por lo general, dos hilos
dobles de urdimbre por cada uno de ligadura o trama, dibujando formas con
flores y estrellas concéntricas de pétalos pares (4, 8 ó 10) que han sido
elaboradas dentro de diseños de cuadrados y rectángulos (López-Redondo y
Marinetto-Sánchez, 2012), (Fig. 5). La procedencia exacta de estos tejidos no
se sabe con certeza, ya que la colección de Lázaro Galdiano pudo haberse
adquirido por lotes de arte de dueños anónimos sufriendo varios expolios y
fragmentaciones de su propiedad sin que existieran escritos o inventarios que
documentasen estos movimientos (López-Redondo, 2010). El uso de estos
tejidos con motivos florales era enormemente variado: desde indumentaria
religiosa y civil (banderas, mantas para caballos, tiendas de campaña, forros de
ataúdes de pino, etc.) hasta para uso doméstico (cortinas, alfombras,
almohadones y cojines, cinturones de boda, manteles, ropa de cama, tapices o
reposteros y ropas o atuendos personales) (López Redondo y Marinetto-
Sánchez, 2012; Partearroyo Lacaba, 2005).



Fig. 5.- A) Ejemplo de composición simétrica floral en tejido. Museo Lázaro Galdiano, Inv. nº 1690, detalle de fragmento con decoración floral de 8 pétalos de cinturón de boda marroquí de lunares y losanges. Un hilo de urdimbre de ligamento por dos hilos dobles de urdimbre de fondo. Marruecos (Fez), siglos XVI-XVII. B) Otro ejemplo de composición simétrica floral. Tejido Nazarí (s. XIV) de lacería y rosetas entrelazadas de cuatro pétalos y círculos. Inv. 3835. Rectángulo de 9,5 cm con dos ejes de simetría, uno vertical y otro horizontal. C) Composición simétrica floral de tejido con decoración de estrellas de ocho puntas y rosetas, fragmento de un hzam (cinturón de boda de la ciudad de Fez). Inv. 11.507. Granada, Nazarí siglo XVI. Cuadrado de 4,2 cm de lado cuya diagonal la forman el centro de las rosetas y se repite en dos ejes de simetría, uno horizontal y otro vertical.


La simetría sería un valor para la belleza y una característica implicada

en la selección sexual y por lo tanto la selección natural. El matemático y

filófoso Hermann Wysl (1952), afirmó y demostró en su reciente escrito que la

belleza está ligada con la simetría (Weichselbaum y cols., 2018). Del análisis

facial de las personas y sus características más o menos simétrica, se extrae

información sobre el nivel hormonal o fertilidad, la atracción, personalidad,

familiaridad, etc., datos que procurarían maximizar los beneficios de la elección

de pareja sexual (Little y cols., 2011). La adaptación evolutiva podría tener un

importante papel en la preferencia por simetrías (Weichselbaum y cols., 2018).

Sin embargo, su relevancia ha sido cuestionada, ya que “aunque la simetría es

ciertamente atractiva, existe algo estéril en su rigidez, que lo hace menos

atractivo que la belleza asociada a la asimetría, menos predictiva y más

dinámica” (Weichselbaum y cols., 2018). En un estudio llevado a cabo en la

Universidad de Viena sobre estudiantes de Arte y Psicología, se pudo concluir

que la preferencia por la simetría no dependía de la experiencia o conocimiento

de arte, más bien al contrario, el conocimiento del arte inclinaba las

preferencias ligeramente hacia los patrones asimétricos (Weichselbaum y

cols., 2018).


Charles Darwin (1809-1882) estudió la simetría entre sus temas

relacionados con la evolución y la competencia intra e inter especies. Analizó la

naturaleza de las plantas y flores con amplia atención (Pannell, 2017) y escribió

un tratado específicamente sobre las orquídeas, respecto sus variadas formas

y “su conducta” o maneras de atraer a los insectos para ser fecundadas.

También realizó otro amplio estudio sobre las diferentes formas de las flores,

en el año 1877. En su obra y complementando el trabajo de da Vinci, se analiza

el fenómeno denominado “hercogamia recíproca” o heterostilia, esto es, el

polimorfismo morfológico de separación espacial de anteras (parte masculina) y

estigmas (parte femenina) dentro de una misma flor para evitar la

autofecundación. Sin embargo, en sus escritos afirmó que también se dan

algunos casos de flores cleistógamas, en las que la autofecundación es posible

sin mediación de insectos (Fig. 6). Después de más de 150 años, las teorías de

Darwin sobre la heterostilia siguen siendo aún de utilidad para los

investigadores botánicos actuales (Cohen, 2010).


Fig. 6.-. Dos dibujos de Darwin sobre flores heterostilias. En la de la izquierda (A), se aprecian dos de los morfos, uno llamado Thrum, con estambre largo y pistilos cortos y el otro morfo llamado Pin con estambre corto y los pistilos largos. En la figura B se aprecia la morfología de distilia en Primula Vulgaris con ambas morfologías (Thrum y Pin) autoincomplatibles. 

La vida de Darwin transcurrió a lo largo del S. XIX, coincidiendo con el

período cultural del Romanticismo, en el que la moda se polarizaba entre

hombres y mujeres, maximizando la visualización de los caracteres sexuales

secundarios con la vestimenta (cintura de avispa, anchura de hombros, etc.),

incrementando la silueta artificial femenina de reloj de arena, que enfatizaba los

contornos del cuerpo (Garcia-Falgueras, 2013). La época romántica fue muy

prolífica en términos artísticos e intelectuales.


6.- FLORES EN LA ACTUALIDAD

Las flores son tendencia. Proporcionan la posibilidad de lucir looks

frescos combinando estampados de flores, cuadros vichy o insectos como

elementos de la naturaleza en su verdor salvaje en medio de las ciudades,

como tesoros en movimiento que hicieran “la fotosíntesis” brotando en del

bullicio urbano. Como en años atrás y el movimiento hippie “flower power” en la

actualidad las flores vuelven a retomar protagonismo. Incluso durante el

invierno, las flores prevalecen en los vestidos o como complementos para

animar y borrar las nubes del frío estival.


Hoy día, existen algunos diseñadores de diferentes países que se han

especializado en motivos o composiciones florales como su modus vivendi. La

gran mayoría de diseñadores o estilistas en la actualidad han aplicado flores

para sus creaciones de moda y/o han incluido, aplicado o elegido las flores

para la composición de sus telas o trajes en algún momento o en algún diseño.

Por ejemplo, la portuguesa Alexandra Oliveria diseñó en 2011 un chal con

bonitas flores tejidas llamado “Roses” en el que unas flores rojas tipo rosas se

configuraban sobre un sencillo chal como en tres dimensiones (Colchester,

2007) (Fig. 7).


Fig. 7. Chal de la diseñadora portuguesa Alexandra Oliveria titulado Roses, presentado en exposición en el año 2011. Las flores recuerdan a las rosas, tipo Rosa Gallica (imagen 1) de flor roja con los estambres amarillos muy evidentes. Pero también podrían ser flores de Camellia (imagen 2) o de granado (imagen 3).


Para el artista visual contemporáneo inglés Michael Brennand Wood, el

tema de mayor especialización en sus diseños es el floral (Colchester, 2007).

En su trabajo creativo, Brennand procura crear formas de flores realistas

elevadas en tres dimensiones sobre el plano, mediante bordados, entrelazando

los conceptos de textil, técnica e historia (Fig. 8).




Fig. 8.- Composición floral textil del artista Michael Brennand, Wood titulada “Crystallized Movements” (2004). En esta imagen pueden apreciarse flores basadas en la familia Compositae, familia de las margaritas. Las flores rojas podrían ser de otra familia también, de la Ranunculaceae. Las especies que parece se estarían describiendo son la Gerbera jamesonii para las  flores rojas (imagen 1), la Anemone St. Brigid para las flores rojas y rosas (imagen 2) y la Gerbera jamesonii también para las flores amarillas. Las flores naranjas podrían ser Calendula officinalis (imagen 3).


Los diseñadores de moda en la actualidad incluyen o han incluido con

frecuencia tejidos floreados para sus composiciones estilísticas. Un caso

particular, por su recurrente afinidad a las flores, sería el caso de los

diseñadores holandeses Sheila de Vries y Gideon de Vries (madre e hijo), que

adornan con frecuencia sus alegres y coloridos conjuntos u outfits en pasarelas

nacionales e internacionales con motivos florales, flores o estampados

primaverales (Figs. 9 y 10). Holanda fue la cuna intelectual del pensador

botánico Carolus Linneaus, teniendo una amplia cultura y afinidad respecto las

flores, concretamente por los tulipanes (mercado de las Flores en Ámsterdam y

varias ciudades), que ha trascendido y trasciende fronteras y expresiones

culturales diversas como la moda.



Fig. 9.- Tres ejemplos de la firma holandesa Sheila and Gideon de Vries, en los que se aprecian motivos florales, tejidos floreados, con bordados y simetrías vegetales, como tema principal o complementario, en colores vivos sobre negro. En la imagen 1 se aprecia el dibujo de flores de rosas de flor doble con sus hojas de rosas, aunque también recuerdan a las peonias. Las flores de la imagen 2 se asimilan a las Camellias. Por otro lado, las florecillas de la imagen 3 de pétalos rosas y/o blancos, serían similares en su forma, que no en su color, a los pequeños Narcisos (Narcissus Tazetta).


Fig. 10.- Otro ejemplo más de la firma holandesa Sheila and Gideon de Vries. En este caso, las hojas que se aprecian sobre fondo negro central podrían estar basadas ligerísimamente en las hojas de la adormidera (Papaver somniferum) (imagen A) aunque por similitud, también podrían tener algo de las hojas de acanto (Acanthus mollis) (imagen B). Por su parte, las flores que aparecen de color anaranjado amarillento podrían tratarse de flores de la adormidera de flor doble, en su forma, que no en el color, ya que este color no existe en esta especie (imagen C).


CONCLUSIÓN

Las flores contienen un valor sugerente ya que son la antesala del fruto
producto del diálogo entre la flor y los insectos. Este matiz junto con la belleza y
variedad de coloridos, formas y perfumes, se expresan con frecuencia en la
moda desde la época del antiguo Egipto, debido a los valores atemporales de
la naturaleza. La fascinación por estos elementos naturales ha existido en
algunos de los intelectuales más relevantes de nuestra era, quienes han
proporcionado ideas, clasificaciones o explicaciones que bien podrían servir de
inspiración o sustento creativo para las mentes inquietas de los diseñadores de
moda actuales, en constante actividad y ejercicio compositivo. Los tejidos
Nazaríes, algunos muy bien preservados, serían un ejemplo de cómo, en un
momento concreto de la historia con unas técnicas específicas de tejido y
colorantes (chinchilla para el granate), las flores estaban presentes en multitud
de telas, quizá despertando o acompañando el pensamiento de los pensadores
que posteriormente procederían a estudiarlas, clasificarlas y describirlas. Los
detalles de las telas y de sus bordados florales estarían ofreciendo mucha más
información que la percibida a simple vista. Con este escrito hemos procurado
poner en evidencia el gran interés de la temática e iniciar el camino para otros
estudios e investigaciones en este área.


CRÉDITOS DE LAS IMÁGENES
Las reproducciones pictóricas y fotografías presentadas corresponden a piezas
que proceden de archivos con licencia libre en el dominio público como
Wikimedia Commons, o están liberadas bajo licencias libres. Son dibujos
ilustrativos de tejidos que ejemplifican las ideas expresadas en el texto.


AGRADECIMIENTOS
Nuestro agradecimiento al Instituto de Neurociencias de Holanda en
Ámsterdam (NIN) y en concreto al Profesor Dick. F. Swaab por su ejemplo en el método de estudio e
investigación. Al experto investigador en Botánica don Eduardo Barba, por
compartir sus amplios conocimientos sobre flores mediante sus detalladas
descripciones y denominación florales. A los diseñadores holandeses Sheila de
Vries y Gideon de Vries, por inspirar este escrito y facilitar sus imágenes.

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